El mar de las penas. No siempre el hombre es el monstruo más peligroso

Sea of SorrowsLos autores de La Carretera de los Huesos nos traen en El mar de las penas una pesadilla en pleno Mar del Norte. Un grupo de hombres se enfrentan a lo peor de la humanidad, y a lo peor del fondo del mar.

El mar de las penas nos lleva a un mundo real en el que la fantasía aporta el elemento de terror puro. En el que la humanidad aporta el verdadero horror. Rick Douek y Alex Cormack regresan al género que los dio a conocer y dejan un relato terrible y adictivo para cualquiera amante del thriller y del terror.

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Una historia de horror

Planeta Cómic continúa con la publicación de nuevas obras independientes de cómic americano, aportando color a un mercado lleno de superhéroes. El mar de las penas es una historia de horror en la que la amenaza externa no ejerce de unificador para los personajes. El grupo es un nido de desconocidos que no se fían de nadie. El egoísmo y la ambición humana no se apartan para luchar unidos contra un mal primigenio, son islas que se conquistan con facilidad. Tristemente es más real de lo que la ficción suele usar, el hombre es lobo para el hombre.
Rick Douek teje una historia donde los personajes y sus relaciones son tan oscuras como el fondo del océano que los rodea. El fin de la Guerra que terminaría con todas las guerras no trajo un mundo de bonanza y el ganarse el pan o llegar a lo más alto de la sociedad. Sigue siendo una guerra, donde el coste para ganar no es importante. Jim hará lo que sea para ello, pero en su contra cuenta con Deke, un veterano que ya ha presenciado el horror y solo desea el vacío, el olvido para estar en paz. El hombre de la superficie contra el buzo. En medio de todo esto el mar revela uno de sus muchos secretos. Es un amante cruel y sus regalos cuestan sangre.

La historia

El mar de las penas recrea un conflicto eterno, el del hombre en un ambiente cerrado. Se desliga de las historias de terror más típicas donde el miedo une a los hombres y se acerca a la paranoia de otros antecedentes como La Cosa de Carpenter. Una historia oscura que remite a la humanidad y sus pecados, y a sus valores y lo que los define frente a todo, el valor de hacer lo correcto.
Alex Cormack tiene un trazo oscuro, lleno de rayas y manchas que dejan un estilo tenebroso y oscuro. Pero a pesar de su gran expresividad es definido y detallado. Quizás las tramas hoy día no suelen ser muy comunes, pero bien usadas crean profundidades más potentes que con los colores y bien usados, como es el caso, crean una sensación asfixiante y que atrapa la vista.
Estamos ante una obra corta que brilla por ser concisa, directa y dura. Siempre va hacia adelante y todo funciona. Los flashbacks mínimos y bien usados dan los respiros al ritmo de la trama para que el lector se relaje y poder volver a colocarlo en tensión con nuevos caminos.

Una obra que hará delicias a los amantes del género y que a otros menos gustosos dejará un buen sabor de boca con muchos valores que no se esperaran encontrar.

Descripción: Unos años después de la Gran Guerra, el Atlántico Norte lo recorren tripulaciones independientes ansiosas por encontrar tesoros. Un antiguo oficial de la marina contrata los servicios del barco de vapor Vagabundo y lo lleva hasta un submarino hundido en el que hay una fortuna en oro. Las tensiones van en aumento a medida que unos y otros en la tripulación van ideando cómo traicionarse. No obstante, la oscuridad del fondo marino esconde terrores terribles ¡para los que no están preparados! Lánzate de cabeza a las aterradoras y gélidas aguas de esta novela gráfica —obra de Rick Douek y Alex Cormack, ¡el equipo creativo que está detrás de La carretera de los huesos!— que transcurre en las profundidades del océano y que tiene, además, un giro espeluznante. «Impulsado por la fuerza de una escritura magistral y con un dibujo sobresaliente que define el género, El mar de las penas fluye de maravilla», Multiversity Comics